viernes, 28 de marzo de 2008

A las trincheras!!!!

¿Por qué cuando naces no vienes con unas instrucciones bajo el brazo? ¿ Por qué nadie te avisa que la vida va a ser una continua lucha? ¿Por qué no te dicen que si quieres no seguir al resto tienes que luchar más?
Aunque si supieras todo, ya no sería lo mismo.

No quiero dejarme. No quiero que me puedan.
Quiero cambiar el mundo.
Quiero hacerlo diferente.
Quiero contribuir a la esperanza.
No nos cansemos. No permitamos que esto se rompa y no podamos recomponer ese rompecabezas desdibujado en añicos.
Seamos como Mary Poppins para el resto. Lleguemos en el momento preciso. Quedémonos hasta que nos necesiten. Compongamos un mundo de ilusión. Cada uno con su pequeña aportación.

No dejemos de luchar nunca.
A las trincheras!!!

lunes, 24 de marzo de 2008

Mimitos por favor


Cada vez es más frecuente y me inquieta. Está ocurriendo últimamente. Voy a los sitios a comprar y no me siento atendida, ¿querida?. Yo pienso que si acudes a un banco, peluquería, asesoría o lo que sea, tú eres el cliente preferente. Tienen que tratarte como si fueras el único, porque es su mínima obligación y ocupación, sobre todo si quieren volver a ver tu cara bonita.
Yo no digo que te hagan la pelota, pero sí que te mimen, que salgas de allí con una sensación de satisfacción, plenitud, sonrisa y ganas de repetir. También que te orienten, pues ellos se supone que son los que saben. La última es que no te dan ideas, incluso a veces riñen. Lo que me faltaba.

-¿Tienen billeteras?-
-mire por ese lado- me dijo, te señalan el lugar y hala,a buscarte la vida

Estas navidades pasadas fue curioso lo que me ocurrió. Voy a una librería a preguntar por un libro y no lo tenían. Le digo al tipo allí sentado que bueno, que si me puede recomendar otro. Me contesta que -él no es muy bueno en eso de recomendar libros... -Me quedo con la cara a cuadros y me voy. Luego pienso, para qué pone éste una librería. Desde luego para vender libros, de esa manera, ni uno.

Caso aparte, ocurre además, que aunque no quedes satisfecho con el trato o el servicio requerido, ellos te van a cobrar lo mismo.

El mundo está muy raro y como no dé un giro, vamos a pique. Aunque claro, si al resto le da igual...
A mi, no.