Las prisas, preocupaciones, rutina, hacen que dejemos de lado las pequeñas experiencias que surgen de una forma muy sencilla, pero que nosotros, ciegos y
Así que la próxima vez que te dirijas al colegio, instituto, universidad, a trabajar o a lo que sea, deja el Mp3, Mp4, iPod, iPhone (qué puesta estoy) o el periódico a un lado, levanta la cabeza y contempla.
Descubrirás cosas maravillosas, diferentes, originales: un balcón, una flor, una ardilla, unos patos en vuelo, un rayo de sol entre las nubes, un árbol que estaba ahí tan tranquilo viéndote pasar todos los días pero que ni lo habías visto, un edificio antiguo, las gotas de lluvia sobre las hojas...
La cosa más curiosa que he contemplado yo últimamente ha sido a un cisne persiguiento a un pato por todo un estanque.
Sin palabras.